El hidrógeno es un elemento químico de la tabla periódica, con el símbolo H y el número atómico 1. Es el elemento más ligero y más abundante en el universo, constituyendo aproximadamente el 75% de su masa elemental. A temperatura y presión normales, el hidrógeno es un gas diatómico (H2) incoloro, inodoro e insípido.
El hidrógeno juega un papel fundamental en la química y en diversas reacciones químicas, siendo un reactivo clave en la formación de muchos compuestos, incluyendo el agua (H2O). En condiciones de alta temperatura y presión, el hidrógeno puede participar en procesos de fusión nucleares, como los que ocurren en el interior de las estrellas, incluido el sol.
En su importancia industrial, el hidrógeno se utiliza en la producción de amoníaco, en la refinación de petróleo y como agente reductor. En el contexto de la energía, el hidrógeno es considerado una fuente de energía limpia y sostenible, ya que puede ser utilizado en celdas de combustible para generar electricidad, produciendo únicamente agua como subproducto.
Sus isotopos más conocidos son el deuterio y el tritio, que tienen aplicaciones específicas en la ciencia y la tecnología. En resumen, el hidrógeno es un elemento vital en la naturaleza y en diversas aplicaciones tecnológicas.